¿Qué esperamos?

¿Qué esperamos para dejar de contaminar?, ¿qué esperamos para dejar de matar?, ¿qué esperamos para cambiar?.
La contaminación es nuestra enemiga y somos nosotros los que la creamos.
La falta de conciencia ha generado la fabricación de gases tóxicos. Gases que se eliminan a la atmósfera y destruyen la capa de ozono. Capa q nos protege de los rayos del sol. Rayos que provocan cáncer.
Arrojamos basura al suelo, a los mares, a los ríos. Pero ¿qué va a hacer tirar un papelito al piso?, pero ese papelito sumado con el resto mata animales, contamina el medio ambiente, arruina a la madre tierra.
Talamos árboles como si en poco tiempo vuelven a crecer, generado la destrucción del hábitat de muchos animales, que hoy están en peligro de extinción.
Luego nos quejamos cuando se producen inundaciones, incendios, lluvias toxicas, cuando los mares y ríos están contaminados. Si somos nosotros los que lo provocamos, ¿de qué nos quejamos?
¿Por qué no empezar a cambiar? ¿Por qué no tomar conciencia? ¿Por qué solo lo decimos y no lo hacemos? ¿Qué pasará con el mundo dentro de unos años? ¿Qué será del futuro?.
¡El peligro es ahora, el cambio debe ser ya!
La esperanza sos vos, el mundo esta en tus manos.

Una razón más para destruir al mundo: RUIDO

Uno de los factores de la degradación ambiental es la contaminación sonora. Si entendemos ‘ruido’ como todo sonido no deseado, nos damos cuenta q los bocinazos, la música fuerte, las motos, alarmas, construcciones y los aviones al despegar son cosas innecesarias que afectan nuestra salud. Una de las causas del aumento del ruido es la modernización de las cuidades, pero vale la pena darle una razón más al mundo para destruirlo?. El ruido enferma. Los decibeles en exceso dejan marcas en el organismo. Cuando el aparato auditivo da una ‘señal de alarma’ no hay que dejarla pasar, porque no hay recuperación.















Se puede evitar el ruido:
El estado deberían apuntar a:
• Promover una cultura menos ruidosa.
• Alentar la educación vial.
• Ejercer efectivamente el control y poder de policía.
• Incrementar el arbolado y otras barreras para mitigar el ruido.
• Reducir las fuentes del ruido como las emisiones de los vehículos a motor, las maquinarias de construcción, los aparatos domésticos, etc.
• Implementar la planificación urbana: alejando las actividades más ruidosas de las zonas residenciales.
• Implementar la planificación integral metropolitana y gestión del transporte: fomentando el uso del transporte público y del transporte no motorizado y cumpliendo con la revisión vehicular.
Los ciudadanos también podemos ayudar…
• Informarnos.
• Cumplir y hacer cumplir las normas vigentes.
• Respetar los horarios de descanso.
• Denunciar ruidos molestos.
• Promover políticas educativas.
• Acudir a la Justicia (recurso de amparo).

Mientras tanto habrá que seguir conviviendo con ruido ya que el silencio es un bien cada vez más difícil de conseguir.

Salvando Nuestra especie, también salvamos la de ellos

Los lobos marinos corren peligro en el puerto de Mar del Plata
Por la ausencia de políticas ambientales y tareas de limpieza de las aguas del puerto de la ciudad, la basura que generan diariamente los barcos pesqueros está provocando la muerte de cientos de los tradicionales lobos marinos.
La principal causa que genera la muerte de los animales son los sunchos (en su mayoría, los sunchos son cintas confeccionados de material plástico utilizadas para prensar cajas de cartón para transportar pescado congelado) También pueden ser tanza y sogas de nylon que los pescadores arrojan al agua y con los que los lobos marinos se enredan, los laceran y terminará causándoles la muerte por asfixia. Además, se han constatado que las manchas que tienen estos animales en sus lomos son producidas por los hidrocarburos que se encuentran en el agua.
Debido a la gran cantidad de denuncias realizadas por los vecinos de la zona, la Fundación Argentina para el Bienestar Animal (FABA), se está ocupando del tema. A través de su Departamento de Crueldad Animal, inició una demanda contra la Secretaría de Política Ambiental del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires y contra la Prefectura Naval ante el Juzgado Federal Civil y Comercial nº4, Secretaría nº11 de la ciudad de La Plata por la falta de aplicación de políticas ambientales contra la contaminación en el puerto de la ciudad de Mar del Plata, que ya ha producido la muerte de cientos de lobos marinos que conviven diariamente entre los barcos pesqueros.
El Estado Provincial debe tener a su cargo la adopción de todas las medidas tendientes a disminuir el daño ambiental y la Prefectura Naval Argentina ejerce sobre el puerto de Mar del Plata el poder de policía; además debe realizar campañas para concientizar a las personas para que no dañen el medio ambiente.

¿Playas contaminadas?

El problema de la contaminación no es ahora del mar, nos afecta, nos involucra y nos incumbe a todos, las consecuencias de las mismas derivan en enfermedades e infecciones que se propagan constantemente.
Más allá de las causas ambientales como pueden ser las mareas rojas, cambios climáticos inesperados o condiciones extremas como lluvias o huracanes, inevitablemente el origen de la contaminación es humano.
Por:
* Derrames de fosas sépticas, plantas de tratamiento o alcantarillados.
* Residuos de recubrimientos arquitectónicos (impermeabilizantes y pinturas).
* Residuos comestibles arrojados al mar por restaurantes que no cuentan con infraestructura para eliminar sus desechos.
* Residuos de pescados y mariscos producto de la actividad de pescadores al limpiar sus productos en las playas.
* Desechos de los barcos y otras embarcaciones menores (aceites o basura).
* Residuos provenientes de actividades industriales.
* Descargas de drenaje —tratadas o no— de origen doméstico, agrícola e industrial, cuando los drenajes del alcantarillado llegan directamente al mar o debido a la acción de mareas y corrientes, ya que pueden revertir los contaminantes hacia la zona de playas o concentrarlas en ellas durante días.
* Lavar el auto en la calle con detergentes no biodegradables o utilizar materiales de construcción como yeso diluido o cemento, pueden tener sus efectos en la contaminación de una playa.















Si nos centramos en la ciudad de Mar del Plata podemos enumerar algunos de estos aspectos a tener en cuenta:
* Insalubridad del basurero municipal y lentitud en la construcción de la planta de separación de basura reciclable.
* Deficiente funcionamiento de la planta de tratamiento de efluentes cloacales que genera la contaminación del mar y de las playas de “La Feliz” con excrementos, orín, productos químicos y otros desechos.
* Preocupante estado de los tanques de almacenamiento de combustible del puerto, que generan contaminación por derrames y podrían incluso presentar riesgos de explosión. (Cuestión no difundida en los medios de comunicación.)

La contaminación no sólo daña el tesoro más preciado de "La Feliz", sino que también es una terrible amenaza para la salud de la gente.
Meterse o no meterse en el agua puede ser la diferencia entre la salud y la enfermedad.
Hongos, manchas en la piel, diarrea y hasta síndrome urémico hemolítico pueden ser las consecuencias de una simple zambullida en el mar.”

¿Qué esperas para cambiar tus hábitos como ciudadano?

No se trata sólo de estar alertas, se trata de ACTUAR

“No se trata sólo de estar alertas, se trata de actuar“, dice Marcelo Cantelml, editor jefe de la sección "El Mundo" del diario Clarín. Una preocupación que debe ser inmediata no podrá esperar a que los efectos se hagan notorios e irremediables, en ese momento ya será tarde para buscar soluciones. No pueden compararse los tiempos de reacción que mantiene la naturaleza comparado con los períodos humanos.
Y nuestra pregunta es ¿Por qué si podemos actuar tan rápidamente frente a los prototipos de moda, no somos capases de seguir la moda que nos sugiere cuidar lo que es nuestro? ¿Por qué si es tan fácil comprarse el primer jean que visten los modelos, escapamos a defender la vida de nuestro planeta, a defender nuestra vida?
Se trata de cambiar… y si bien es necesario un cambiar global, esta mejora solo se logrará desde un cambiar local. Pensemos en un ejemplo muy ligado al tema y tan común ¿Qué porcentaje de la población utiliza correctamente el protector solar (protección mínima: factor treinta)? Todos sabemos que de este modo, el sol puede ser el causante de muchísimas enfermedades locales, y sin embargo, por estar a la moda, somos capaces de matarnos.
Entonces tres adolescentes hoy piensan en una moda que al mismo tiempo que integra a la sociedad en un modelo, la beneficia… sí, poner de moda: “cuidarnos”.

PLAN DE ACCIÓN

Tomando la película "Cadena de favores" como ejemplo, comenzamos a imaginar cómo sería adaptar el argumento de esta ficción a nuestra moda: Sí tan solo una persona transmitiera a otras dos, al menos tres acciones breves y concretas:

-Si tenés que dirigirte a un sitio cercano procura caminar sin recurrir a los medios de transportes que tanto contaminan, con lo que estarás solucionando al mismo tiempo dos problemas: la contaminación y tu salud.
-Cada vez que uses el agua ya sea para lavarte los dientes, bañarte, lavar los platos, el auto, etc., pensá que de los 6250 millones de habitantes del mundo, unos 1100 millones no tienen acceso al agua potable y más del doble vive sin condiciones sanitarias dignas.
-En vez de tirar algo al suelo buscá un cesto cercano, teniendo en cuenta que solo un chicle tarda mil años en degradarse, y nos estará perjudicando hasta entonces.

Te confío estas tres postas para que las cumplas durante una semana responsabilizándote a pasarlas también a otras dos personas como lo he hecho yo, intentando adquirir nuevos hábitos de vida e integrándote a esta moda que ya está vigente.”
Proyectemos que sólo esa persona cumpla con el mínimo pactado, en un cálculo de 5 días, treinta y dos personas ya estarán al tanto. Ahora bien en un año, más de dos mil trescientas treinta y seis ciudadanos integrarán nuestro plan. ¡Y cuántos más si consideramos la buena predisposición y colaboración de los participantes quienes puedan acrecentar esta red!
Para concluir queremos hacerlo de la misma forma que iniciamos, pero ahora la pregunta nos gustaría no hacérnosla a nosotras, sino esperar de todos los mismo… es hora de preguntarnos ¿qué pasa con nuestros valores?
…Esperemos que sea así, ¿Qué esperamos?
NO ES DEMASIADO TARDE AÚN.